RESTO DEL MUNDO

EE UU - Kasparov planta cara a los jóvenes en su regreso

agosto 15, 2017 Planetajedrez 0 Comments

 
Doce años después de su retirada, a los 54 años, Garry Kasparov sigue siendo un ajedrecista temible. En su regreso (temporal) a la competición, el excampeón del mundo demostró en San Luis (Estados Unidos) que aún es uno de los mejores. El ogro de Bakú sigue inspirando respeto y en las tres primeras rondas del torneo de partidas rápidas arrancó tres tablas (el botín pudo ser mayor) ante Sergey Karjakin (último candidato al título, número 12 del mundo), Hikaru Nakamura (número 7) y Lenier Domínguez (24). Su cara de concentración lo decía todo. 

La expectación era inmensa en San Luis y en todo el mundo. Para muchos, Garry Kasparov es el mejor ajedrecista de todos los tiempos y, pese a que la edad tampoco perdona en este juego, mantenerse a su nivel sin competir durante más de una década y con más de cincuenta años es una proeza al alcance de muy pocos. Es cierto que el ruso nunca ha dejado del todo el ajedrez. Sigue practicándolo por internet y ha entrenado a algunos de los mejores, como Magnus Carlsen e Hikaru Nakamura. Con ninguno de ellos mantuvo una relación idílica, pero sería falso decir que Kasparov ha estado alejado de los tableros durante todo este tiempo.

En medio de un buen ambiente, regado con el dinero del mecenas multimillonario Rex Sinquefield, cuando los relojes se pusieron en marcha se pudo ver que Garry venía bien preparado y no estaba para bromas. En la primera partida, contra Karjakin, logró una mínima ventaja, con blancas, que nunca fue suficiente para hacer dimirir al «Ministro de Defensa».

En esa misma ronda, por cierto, Levon Aronian demostró que es uno de los grandes maestros más en forma. Sacrificó la calidad ante David Navara a cambio de un ataque incierto y el checo, que no soportó la presión, no acertó con la mejor defensa. En el otro lado de la balanza, Caruana tiró de forma increíble su partida ante Le Quang Liem al dejarse atrapar en una red de mate con dama y torre contra dos torres.

En la segunda ronda, Kasparov llevaba las piezas negras ante su exdiscípulo Nakamura, uno de los mejores del mundo en partidas rápidas. El ruso salió de la apertura con mejor posición, como si el americano fuera el jugador necesitado de ponerse al día. Este supo defenderse, sin embargo, e incluso darle la vuelta a la partida, tras alguna imprecisión del más canoso de los dos. Con un peón de más, sin embargo, no supo rematar un final en el que Kasparov se agarró al tablero como si fuera la partida más importante de su vida. Y en ese momento lo era.

La tercera partida del día parecía una buena ocasión para el viejo gladiador, ante el cubano Lenier Domínguez, pero fue el duelo más soso, con tablas en 29 jugadas, menos de la mitad que en el duelo anterior.

La clasificación temporal está encabezada por Levon Aronian, Fabiano Caruana, Ian Nepomniachtchi y Le Quang Liem, todos ellos con cuatro puntos. El grupo perseguidor (todos con 3 puntos) está formado por Nakamura, Karjakin, Kasparov y Domínguez. Vishy Anand y Navarra cierran la tabla con un solo punto y muy pocas opciones de triunfo. Así de dura es la competición, aunque más difícil (perdón por el egoísmo) es seguir las partidas y escribir de ellas sin una buena conexión de internet.